A pesar de que no se venda en grandes superficies comerciales, la miel de eucalipto es muy común en nuestro país, aunque hay zonas de la geografía española donde la calidad de esta miel es mayor que otras y en Asturias tenemos la fortuna de poder disfrutar de una de las mejores del Estado, tal y como comprobarás por ti mismo cuando la pruebes en casa. 

Lo primero que llama la atención de esta miel es su color, ya que es clara. Una vez la catas, destacas su potente sabor con tonos a madera, la del árbol de la que ha sido extraída la miel o, más bien, del polen que las abejas han extraído para, después, llevar a sus panales y crear allí la miel que luego el ser humano se encarga de extraer. 

En cuanto a sus propiedades, destaca su alto aporte vitamínico (A, B y C), además de aportar fósforo, hierro y calcio, entre otros minerales. Además, su potente aroma ayuda a mejorar el estado de ánimo y a despejar las vías respiratorias - en este caso concreto, siempre es más recomendable tomarla, no sólo disfrutar de su agradable aroma- a modo de remedio natural. 

Por último, cabe señalar que tiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, así como expectorantes. De ahí que se utilice como remedio natural para reducir enfermedades comunes, especialmente aquellas relacionadas con las vías respiratorias y urinarias.

Al ser una miel pura tiende a cristalizar, aunque no tanto como Brezo y Castaño, para que vuelva a estar liquida basta con meterla en un baño maría, que no suba mucho de temperatura sobre 30-40º para que no pierda propiedades.